En el sorteo para los donantes de sangre que acudieron al torneo ha sido agraciado un trabajador del torneo, el encordador Jeison Martín, que además era la primera vez que donaba sangre, es quien se ha llevado un lote de productos donados por la Pastelería Yagüe.
El premio es una recompensa por la labor altruista que hacen los donantes. En el acto han estado presentes Antonio Yagüe, el dueño de la Pastelería Yagüe, Virginia Ruano, directora del torneo y Rocío de la Torre, finalista de la II edición del ITF femenino de El Espinar.